La Asociación de Comunidades de Regantes del Duero (Ferduero) apoya sin fisuras a los regantes del Páramo Bajo de León y Zamora, inmersos en un conflicto con la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), que pretende que los agricultores asuman el coste energético de la elevación del agua en Villalobar. Los regantes defienden que se cumplan los acuerdos de 1995 que les eximían de pagar dicho coste, que supondría, aseguran, la ruina para sus explotaciones.
El presidente de Ferduero, Eloy Baílez, ha asegurado que la reclamación del Páramo Bajo es «extremadamente lógica y razonable» frente a la postura del organismo regulador de la cuenca que, a su juicio, es «absolutamente incomprensible».
Baílez ha señalado que la decisión de CHD de repercutir este gasto en los agricultores «hace inviable» a la Comunidad de Regantes que tendría que asumir un gasto de unos 800 euros por hectárea «a mayores de lo que ya están pagando religiosamente». El presidente de Ferduero explica que CHD va en contra de la resolución firmada en 1995 por el entonces presidente de Confederación, José María de la Guía, sellando un acuerdo político con el Gobierno de España.
En dicha resolución se recoge literalmente «que no ha lugar a la repercusión de los costes del consumo energético y gastos de mantenimiento y reposición que genere la elevación desde el azud del río Esla hasta el canal de transporte del agua», ya que fue el Estado el que decidió, en contra del criterio de la comunidad de regantes, elevar el agua desde el río Esla, con la construcción de una estación de bombero en Villalobar.
Según Baílez, este cambio de postura de CHD hacia los regantes supone una «desigualdad absoluta» para el Páramo Bajo con respecto al resto de comunidades de regantes porque «les quieren hacer pagar dos bombeos en lugar de pagar uno, como hacen el resto de las comunidades». Actualmente ya tienen que asumir un coste de 10.000 euros por hectárea «independientemente de los costes de amueblamiento de las fincas», señala el representante de Ferduero, que incide en que son 48 pueblos los que dependen de la economía de la comunidad de regantes «que apostó por la modernización y por el asentamiento de la población», para sacar adelante sus municipios. Hoy, augura Baílez, «los jóvenes se van a ir del medio rural porque es imposible asumir estos gastos».
Por todo ello, recuerda el compromiso de Confederación de mantener una reunión con la Dirección General del Agua al respecto, y asegura que «es voluntad tanto de Ferduero como del Páramo Bajo llegar a un acuerdo» sobre este conflicto.
También ha aseverado que Ferduero apoyará cualquier movilización que convoque la comunidad de regantes, y que anunció este martes su presidente, Herminio Medina, en una reunión con los regantes mantenida en la sede de Zotes del Páramo.
Fuente: Diario de León