Ambas industrias han comenzado a molturar la raíz en sus factorías de Castilla y León con mejores perspectivas en cuanto a rendimiento por hectárea y polarización respecto a la pasada campaña.
Azucarera comenzó este lunes, 27 de octubre, una nueva campaña remolachera en el norte, este año con la novedad de que las 9.500 hectáreas sembradas se molturarán en la fábrica de Toro (Zamora).
“Como venimos diciendo, los agricultores que antes entregaban en La Bañeza o en Miranda no notarán ninguna diferencia, ni para ellos supondrá trastorno alguno, puesto que tanto la logística del arranque, como la carga y el transporte, correrá a cargo de Azucarera. La única diferencia es que toda la remolacha se molturará en Toro. De este modo, Azucarera podrá concentrar inversiones y mantenimiento en una sola fábrica que recoja toda la remolacha del norte, ganando competitividad en un contexto de mercado muy exigente”, explicó la directora Agrícola de Azucarera, Salomé Santos.
El plan de la fábrica de Toro es moler 8.000 toneladas líquidas al día, lo que supone una duración de la campaña de aproximadamente tres meses y medio. Los arranques se llevarán a cabo de forma escalonada, teniendo en cuenta la madurez del cultivo con el objetivo de que la remolacha llegue a su máximo potencial de sacarosa.
“Este año estamos percibiendo que tenemos un cultivo con mejores perspectivas que el año pasado”, apuntó Santos, gracias, en gran parte, a las condiciones meteorológicas registradas en las últimas semanas, que han ayudado a controlar mejor las enfermedades foliares del fin del ciclo, por lo que la remolacha no ha sufrido ataques agresivos de cercospora.
“Estamos teniendo un cultivo con mayor porcentaje de masa verde y, por tanto, con recorrido para continuar produciendo azúcar. En general, estamos viendo un cultivo más sano que en la campaña anterior, por lo que todo apunta a que tendremos mejores rendimientos que el año pasado, a pesar de las siembras tardías”, añadió la directora Agrícola de Azucarera.
La cooperativa Acor, por su parte, inició la campaña el pasado lunes 20 de octubre, con la previsión de molturar la producción procedente de 9.995 hectáreas contratadas con socios de la entidad. La cooperativa afronta esta campaña con optimismo, confiando en que marque el regreso a la normalidad en rendimientos y polarización, tras varios ejercicios condicionados por la meteorología y sanidad del cultivo.
La riqueza analizada en las primeras 5.300 toneladas recepcionadas supera el 17,5%, un punto más que la anterior campaña. De mantenerse estos datos, con las casi 10.000 hectáreas contratadas, Acor espera superar el millón de toneladas de remolacha.
El presidente de Acor, Jesús Posadas, destacó el buen comienzo de la recepción y los resultados preliminares obtenidos: “Los primeros análisis nos muestran que volvemos a tener una campaña normal en polarización y rendimientos. Es una buena noticia que refuerza la confianza en la estabilidad del cultivo y el trabajo de nuestros socios. Hablamos de un volumen que probablemente supere el millón de toneladas de remolacha”.
Posadas subrayó además que el compromiso de Acor es “seguir garantizando la rentabilidad de los socios y apostar por la modernización constante de la fábrica”.
Fuente: interempresas



